Aunque el lugar de las mujeres en el sector cinematográfico está evolucionando en favor de la paridad, la partida está lejos de estar ganada. La Filmoteca de Andalucía en colaboración con el Institut Français presenta aquí una selección de primeras o segundas películas de directoras francesas y africanas para dar plena atención a sus opiniones sobre la sociedad. Una colección para escapar de las ideas preconcebidas y la discriminación, y confirmar la legitimidad artística de la próxima generación, tanto en fondo como en forma.

El ciclo arrancó el pasado mes de marzo y continúa en mayo en Córdoba con Si le vent tombe (Francia, Armenia, Bélgica, 2020), de Nora Martirosyan. Un auditor internacional francés viaja hasta el aeropuerto de una autoproclamada República Caucásica para evaluar si dar luz verde o no a su reapertura. Un chico local, deambula por el aeropuerto y tiene un extraño negocio. Ambos acaban encontrándose. El resultado no solo logra hacer entender la escala de los temas que explora, sino también da con un buen equilibrio entre un enfoque casi documental y giros narrativos muy dramáticos.

Otra proyección destacada del ciclo en Granada es Les chatouilles (Francia, 2018), primer largometraje de Andrea Bescond junto a Eric Metayer que pone en escena un relato autobiográfico de los acontecimientos vividos por la directora durante su infancia. Un trabajo de resiliencia y de elaboración del trauma a través de diferentes formas de expresión, desde la escritura y la danza, hasta la terapia como medio de exploración y superación de la herida inflingida por la violencia sexual.